En los granos de arena de la playa
atesoramos un instante de dicha.
En la puesta colonial de sol
del sacramento
y sus ruinas.
En el río…
que miramos y reímos.
Dos tardes, dos veces.
En tus senos que buscaré
mientras me dejes
tensos, morados
hacia el horizonte
durmiendo caricias.
En la puesta colonial del sol
del sacramento
y sus ruinas.
Dos tardes, dos veces,
dos noches,
dos vidas en noviembre
conteniendo la respiración,
flotando…
proponiendo no vivir más.
En esa tarde,
en ese instante..
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